
Marisol Carreño, residente del sector, narró que cerca de las 2:00 de la tarde salieron con pancartas a protestar pacíficamente y que en el transcurso de la manifestación pasaron por el lugar efectivos de la Policía de Anzoátegui (Polianzoátegui), Polibolívar y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quienes se marcharon al ver que no había violencia, ni estaban quemando cauchos.
“De repente llegaron guardias en moto y empezaron a dispararle a todo el mundo”, dijo Carreño, mientras su molestia se hacía cada vez más evidente. Agregó que en el incidente resultaron heridos varios niños y una mujer embarazada.
“Llegaron disparando, sin mediar palabra”, afirmó con voz temblorosa y mostrándose nerviosa Roxibel Carreño, quien está en un avanzado estado de gravidez. Tenía más de 20 heridas de perdigones en la parte posterior de las piernas.
Luzmary Caigua salió poco minutos después a reclamar porque su hijo de 14 años, quien es asmático, se desmayó a causa del gas pimienta utilizado por los efectivos para controlar la protesta. La mujer aseguró que el muchacho sólo estaba ayudando a otro adolescente que también resultó herido.
“Necesitamos comida”, “no estábamos quemando caucho ni tirando piedras”, “en vez de darnos comida nos dan balas”, eran algunas de las quejas de los vecinos que se mantenían reunidos fuera de sus casas, a pesar de que la protesta había sido dispersada.
Denuncias
Marisol Carreño, con el apoyo del resto de los manifestantes, señaló que la concejal de Barcelona, Lilibeth Elisandre, quien vive en el sector , les niega la comida y envía a los cuerpos de seguridad a agredirlos.
“Nos dijo que íbamos a comer excremento”, afirmó Carreño, con respecto a Elisandre, quien, según aseguró les dijo que no recibirían las bolsas de comida. Los presentes seguían haciendo denuncias en contra de la edil. Odalys Sabino indicó que ya se han hecho cuatro censos y aún no reciben los alimentos y los demás sectores sí. “C+omo es posible que seamos los únicos que no recibimos nada”.
La concejal negó todas las acusaciones hechas por sus vecinos y aseveró que ella es parte de la comunidad y no les está negando la comida, sino que aún no les ha tocado.
En cuanto a la situación irregular, resaltó que el Estado tiene el deber de garantizar la seguridad y que en el sector han ocurrido varios saqueos.
Tráfico
Largas colas para entrar a Barcelona, especialmente de camiones, provocó la manifestación de los vecinos de Barbacoa por las bolsas de los Clap. Sin embargo, en el lugar no había evidencia de cauchos quemados, ni de violencia. El paso se abrió por completo cerca de las 4:00 de la tarde
FUENTE: María Gabriela García - http://eltiempo.com.ve