La casa que la Alcaldía de Sotillo le prometió nunca se la entregaron y ayer, a las 8 am, fue a protestar junto a otras 124 familias que están en una situación similar para exigir al alcalde Magglio Ordóñez que los atiendan.
“Viví por un tiempo como refugiada en el apartahotel La Llovizna y en el club Cendis. Al final me quedé sin nada”, indicó Guilarte.
“Basta de tanta mamadera de gallo”, “somos madres y padres de familia, no guarimberos”, tenían escrito las pancartas que los manifestantes portaban en la entrada del despacho del alcalde.
El señor Jonathan Rodríguez, quien es uno de los afectados, señaló que 115 familias viven en alto riesgo y otras nueve son damnificadas.
“Ya nos cansamos de esperar. Venimos a exigirle a Ordóñez que nos facilite unas máquinas pesadas para acondicionar un terreno de tres hectáreas ubicado en la zona rural de San Diego y así poder levantar nuestras casas. Si nos dan los recursos nosotros ponemos la mano de obra”, indicó Rodríguez.
Acuerdo
Luego de algunas horas, el director de la alcaldía Rafael Vegas acordó prestar por dos días una máquina para despejar el terreno que los afectados requieren para construir sus viviendas.
FUENTE: Omar E. Pérez (El Mío) - http://eltiempo.com.ve |