Fue una manera de llamar la atención del mundo hacia la rebelión en curso en el país, contra uno de los gobiernos más represivos y violadores de los derechos humanos que tuvo la IV República; el de Rómulo Betancourt. Aunque calificada como “secuestro”, con todas sus connotaciones, aquella fue reconocida como una retención “amistosa”, del famoso futbolista, con el que, según contaba el propio Paúl del Río, pudieron compartir sanamente y conversar sobre las cosas que sucedían en la nación venezolana.
Esta foto le dio la vuelta al mundo. En la misma puede verse a Di Stéfano en su cautiverio, junto al guerrillero Paúl del Río (cuyo nombre de combate era MÁXIMO CANALES). |
Entre otros hechos conocidos, Canales participó en la toma del buque mercante Anzoátegui. Era parte de las “operaciones de propaganda armada para llamar la atención internacional hacia la situación de Venezuela, debido al ocultamiento de lo que sucedía en tiempos de la IV República. Se destacó también como artista plástico y pintor.
Del Río presidía la Fundación Capitán de Navío Manuel Ponte Rodríguez, que funciona en los espacios del antiguo Cuartél San Carlos, en el cual Paúl del Río desplegaba sus últimas actividades para esa organización de ex-prisioneros políticos, que trabajan para rescatar la memoria de toda de numerosos combatientes que enfrentaron valientemente durante décadas, a la pseudo-democracia adeca-copeyana, víctimas del “puntofijismo”, entre cuyos camaradas hubo miles de activistas obreros, campesinos, estudiantiles y populares torturados, asesinados y desaparecidos.
En noviembre de 2006, el luchador social Paul del Río fue atacado por fascistas en una urbanización del Este Caracas, que lo golpearon salvajemente, como parte de las arremetidas de la oposición golpista que protagonizó varias oleadas de violencia contra la revolución bolivariana. De eso quedó registro en Aporrea.org, así como de sus llamados de atención respecto a la situación del Cuartel San Carlos y de algunos otros sitios importantes para los registros y testimonios de la lucha revolucionaria en Venezuela.
¡Paz a sus restos! ¡Honor y gloria a su trayectoria revolucionaria!
A través de su cuenta en Twitter @lortegadiaz, la máxima representante del Ministerio Público, Luisa Ortega Díaz envió su mensaje de condolencia a los familiares Del Río. "Lamento la muerte del luchador social y artista plástico Paúl del Río. Mi solidaridad con su familia", expresó Ortega Díaz en la red social.
Ante esta lamentable noticia, aparecieron mensajes omo el del Defensor del Pueblo, Tarek William Saab, quien comentó que Paúl del Río representa una leyenda de la insurgencia venezolana en la década de 1960. "¡Honor y gloria! a Paúl del Río (Máximo Canales) muerto hoy (domingo) dramáticamente en el Cuartel San Carlos, donde vivía", escribió en su usuario en la red social @TarekWiliamSaab.
El ministro para la Cultura, Reinaldo Iturriza, manifestó su profundo pesar por la muerte de Paúl del Río. "Hace poco compartimos con él en el Cuartel San Carlos. Honor y gloria".
También, a través de su cuenta en Twitter, el jefe de Gobierno del Distrito Capital, Ernesto Villegas, dijo: "honor y gloria a Paúl del Río. Sus manos seguirán esculpiendo y pintando revolución desde el Cuartel San Carlos".
Por su parte, el coordinador de la Comisión Presidencial para la Transformación del Sistema Policial, Freddy Bernal, escribió que Paúl del Río fue un revolucionario incansable, gran artista y dirigente político.
Paúl del Río, hijo de los españoles Jesús del Río y Dora Canales, nació en La Habana, Cuba en 1943 y a los dos años viaja a Venezuela junto a sus padres, en donde se residencian definitivamente. Su padre, panadero, participa clandestinamente con Acción Democrática en la lucha contra Pérez Jiménez. Militó desde los 17 años en el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y a los 19 años, participó con las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN) en la toma del buque mercante Anzoátegui el 12 de febrero de 1963 para denunciar el régimen de Rómulo Betancourt. Además se destacó por su habilidad para el dibujo, quien en la clandestinidad hacía caricaturas políticas para las publicaciones subversivas.
Paul Del Río entrevistado por Jesús Silva
FUENTE: http://www.aporrea.org |