martes, 22 de julio de 2014

Caracas rindió honores a los diez primeros mártires de la Independencia

El Concejo Municipal Bolivariano Libertador de Caracas rindió honores a los diez primeros mártires de la Independencia Hispanoamericana, al conmemorarse este lunes 208 años de sus asesinatos.

Frente a la imagen del pionero de la Independencia de Venezuela, el Generalísimo Francisco de Miranda, ubicada en la Plaza Miranda, parroquia San Juan, representantes de la instancia legislativa municipal, el pueblo organizado y exponentes del folklore venezolano, recordaron la gesta histórica de los precursores independentistas.

El presidente de la Comisión de Contraloría del Municipio Libertador, concejal Carmelo González, resaltó la importancia de recordar a quienes dieron los primeros pasos para la independencia. "Esos mártires que siendo de otros países se unieron a (Francisco) Miranda para zumbar los primeros cañonazos contra el imperialismo español", afirmó.

Comentó que el Plan de la Patria 2013-2019 contempla la preservación del bien más preciado: "Nuestra Independencia".

El historiador, Carlos Edsel, quien participó en esta actividad, recordó parte de la historia ocurrida el 21 de julio de 1806, día en que fueron asesinados los primeros mártires independentistas.

Relató que la expedición de Miranda a bordo del Leander estuvo casi seis semanas en el puerto haitiano de Jacmel. Llegó el 20 de febrero de 1806 y salió el 28 de marzo. Al aproximarse a aguas territoriales venezolanas, cerca del Puerto de Ocumare de la Costa, estado Aragua, fue sorprendida en el atardecer del 27 de abril por dos guardacostas españoles: el Argos y el Zeloso.

"En el amanecer del día siguiente, apenas a ocho millas de la ciudad de Ocumare, se entabló un encarnado combate naval. Los barcos españoles con mayor capacidad de fuego y maniobra capturaron a las dos pequeñas goletas, que se habían alejado de la protección armada del Leander, e hicieron prisioneros a su cincuenta y siete tripulantes", contó.

Como resultado de dicha captura, diez expedicionarios mirandinos, todos oficiales, fueron condenados a ser ahorcados las primeras seis horas de la mañana del 21 de julio, para luego ser decapitados; el resto de la tripulación fue condenada a trabajo forzoso.

FUENTE: AVN

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