Debo destacar la gran disposición de las instituciones del sistema penal involucradas en las audiencias de juicio, para lograr este necesario acuerdo de coordinación en la fijación de la oportunidad cuando tendrá lugar la realización de los juicios orales y públicos.
De esta manera, se garantizan procesos judiciales expeditos, idóneos y sin dilaciones indebidas; lo que pone en evidencia que el Estado venezolano está comprometido con la transformación de sus instituciones y la consolidación de la paz para el pueblo.
El Ministerio para el Servicio Penitenciario también formará parte de este moderno sistema computarizado para garantizar el necesario traslado del justiciable a la sede del circuito judicial. De esta forma, la Agenda Única ataca otras de las causas de diferimiento de las audiencias de juicio.
Estamos ante un paso trascendental para vencer el retardo procesal y la impunidad. El derecho a ser juzgado en un plazo razonable constituye una de mis mayores preocupaciones. Anteriormente, he citado el axioma que “tiempo que pasa justicia que huye”, pues lograr que los testigos, la víctima, los funcionarios policiales, expertos y otros intervinientes, asistan a un juicio 4 ó 5 años después de haber ocurrido el hecho objeto del mismo, es realmente complicado.
El retardo procesal compromete importantes principios constitucionales como la tutela judicial efectiva, el estado de libertad y, según el caso, la reinserción social. De allí, mi gran satisfacción porque en aspectos tan puntuales las citadas instituciones han alcanzado acuerdos para vencer dicho obstáculo.
Hoy, puedo asegurar que el sistema penal nunca había estado tan integrado, tan consolidado y trabajando tan articuladamente en función de la colectividad; por ello, en cuanto a la Institución que dirijo, hago un llamado a los fiscales para que sean ejemplo en el cumplimiento y efectividad de la Agenda Única.
Fiscal General de la República.
Publicado en el diario Correo del Orinoco/ domingo 11 de agosto de 2013/ Pág.33, opinión libre.
FUENTE: Prensa MP |