miércoles, 28 de mayo de 2014

(Opinión) "Rudas Mezones"

Artículo de opinión de la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, publicado en el diario Últimas Noticias, este martes 27 de mayo de 2014

El pasado miércoles 22 de mayo, en un emotivo acto realizado en las instalaciones del Cuartel San Carlos, entregué a sus familiares los restos del estudiante Alberto José Rudas Mezones, para que procedieran a sepultarlo de acuerdo a sus creencias religiosas.

Rudas Mezones contaba apenas con 16 años de edad y estudiaba en el liceo Fermín Toro cuando fue asesinado por funcionarios de la extinta Digepol, durante una protesta estudiantil, el 15 de noviembre de 1961, en las inmediaciones de El Silencio, Caracas.

Con ocasión a esta muerte no se conoce ninguna investigación penal que hayan seguido las instituciones encargadas de la justicia durante esos años, para sancionar a los responsables de este asesinato.

Y como si no bastase con la violación del derecho a la vida de ese joven, cuando se realizaban los actos velatorios en su pueblo natal, Barlovento, funcionarios de la misma policía política que lo asesinó irrumpieron en el lugar y secuestraron el cadáver del estudiante, para desaparecerlo y continuar con las violaciones, ahora contra su familia, al negarles la posibilidad de visitarlo donde estuviera sepultado.

Eran tiempos en que el asesinato, la tortura y la desaparición forzada de personas apuntalaron el plan represivo con el que se pretendían derrotar las legítimas luchas sociales del pueblo venezolano.

Pasaron más de 50 años para que la Venezuela de hoy, respetuosa de los derechos humanos, con instituciones comprometidas con su preeminencia, ubicara el sitio donde habían sido depositados los restos y los identificara.

Es así como el Ministerio Público, articuladamente con la Comisión por la Justicia y la Verdad, la cual me honro en presidir, desarrollan acciones para garantizar el derecho a la verdad, para rescatar la memoria histórica y darle una razón a la sociedad sobre los hechos punibles, criminales y violatorios de los derechos humanos acaecidos entre los años 1958 y 1998.

La entrega de los restos a la familia Rudas Mezones constituye un acto de justicia. Ahora, la investigación permitirá identificar a todos los responsables históricos de torturas, represiones y persecuciones de líderes políticos que dieron su vida a cambio de sus principios de igualdad social; valores que se multiplicarán en el tiempo para formar a hombres y mujeres nuevos, comprometidos con una sociedad justa y solidaria.

Fiscal General de la República

Publicado en el diario Últimas Noticias/ martes 27 de mayo de 2014/ Pág. 34, opinión.

FUENTE: Prensa MP

LEA...