jueves, 1 de noviembre de 2012

Una tembladera delató a "Rosita"

Varias circunstancias se conjuraron para que unos agentes policiales aprehendieran a la mujer más buscada de Venezuela en una humilde urbanización de la ciudad de Valencia.
La actriz y modelo venezolana Jimena Romina Araya Navarro (Rosita) regresaba de hacer unas compras domésticas cuando se topó con dos uniformados que tienen asignada la custodia y vigilancia de la zona industrial de El Recreo. “Ella pasó caminando por aquí y creo que a los policías les llamó la atención las voluptuosas formas de la mujer. Dieron la vuelta y ella se puso nerviosa”, dijo Juan Carlos Sánchez, propietario de un kiosco situado en la avenida principal de Flor Amarillo.

“La mujer se paró y se puso a conversar con ellos y en minutos llegaron más policías. Después ella llamó por teléfono, creo que a su abogado porque al colgar se subió a una patrulla como si nada. La gente criticaba que se llevaran presa a una mujer y se hicieran los locos con los delincuentes. En la tarde me enteré que se trataba de la artista de “A que te ríes”, expresó el comerciante.

La detención de “Rosita” causó revuelo en la comandancia de Policarabobo. Empleados administrativos dejaron de almorzar para ver en persona a la cuestionada artista. La planta baja de la sede policial situada en la avenida Navas Spínola estaba abarrotada de curiosos, en su mayoría familiares de policías, pero el Ministerio Público prohibió que mostraran a la detenida.

Rosita estaba siendo solicitada por el tribunal 2° de control del estado Aragua por la comisión de un delito contra la administración de justicia al estar presuntamente involucrada en la fuga de “Niño Guerrero”, líder de la cárcel de Tocorón, ubicada en Aragua.

“Por la televisión felicitaron a los policías aunque en realidad ellos la estaban fisgoneando y se les iban los ojos. Dicen que ella compró unos cosméticos, pero aquí no fue (...) Yo creo que se puso nerviosa y la traicionaron los nervios de tanta miradera. Ella no es muy alta, pero a los hombres les llama la atención”, señaló Maritza Torres, propietaria de una quincalla adyacente al lugar del procedimiento.

Al momento de su detención vestía una blusa ancha, tenía el pelo recogido con una trenza y ocultaba su rostro con unos lentes de sol.

FUENTE: Gustavo Rodríguez - http://www.ultimasnoticias.com.ve

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