Investigadores de las Universidades de Washington y California, en Estados Unidos, consideran que la luna se formó tras la colisión de un cuerpo planetario contra la Tierra primitiva, señala un estudio divulgado en la revista Nature.
El análisis de isótopos de zinc presentes en rocas lunares obtenidas durante las misiones Apolo (11, 12, 15 y 17), comparadas con rocas terrestres y marcianas, permitió a los expertos desarrollar una teoría planteada hace ya 30 años.
Sin embargo, son muchas todavía las interrogantes a resolver, como por ejemplo, conocer cómo y por qué gran parte de la superficie terrestre está cubierta de agua.
El trabajo tiene muchas implicaciones, no sólo para el satélite natural, también para el origen de la Tierra, aseguran los autores del artículo.
Sin la influencia estabilizadora de la Luna, la Tierra probablemente sería un lugar muy diferente, giraría más rápido, los días serían más cortos y el clima, más caótico y extremo.
Es posible que ni siquiera hubiera estado apto para la evolución humana, señalan.
FUENTE: Prensa Latina