Barcelona.- El silencio que reinaba el inicio de la tarde de ayer en la invasión de Mesones, cercana al peaje de la autopista, fue interrumpido por una ráfaga de tiros. Toda la comunidad se alarmó.
Las balas acabaron con la vida de una adolescente de 17 años que, al parecer, andaba acompañada por una chica de 16 años que logró escapar de los pistoleros.
Los familiares de la víctima no quisieron suministrar información sobre lo sucedido; incluso se mostraron violentos con los representantes de los medios de comunicación y de los cuerpos policiales.
Sin embargo, se supo que supuestamente, la muchacha regresaba de visitar a un amigo que paga condena en el Internado Judicial de Puente Ayala.
Se escucharon dos versiones en torno al hecho: una señala que individuos siguieron a la jovencita desde que salió del recinto penitenciario y la interceptaron cuando llegaba a su casa. Otra, indica que la esperaban en la entrada de la invasión.
Trascendió que fue la madre de la adolescente quien la halló baleada en el pavimento. La mujer escuchó los disparos y al asomarse vio que se trataba de su hija y corrió.
A la escena del homicidio llegaron funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) subdelegación Barcelona, Policía de Anzoátegui (Polianzoátegui) y Bomberos.
Los detectives del Cicpc trasladaron el cadáver a la morgue del hospital universitario Luis Razetti, de Barcelona, donde los forenses le observaron nueve impactos de bala distribuidos en la espalda, pecho, piernas y brazos.
Mala junta
Por la forma como fue perpetrado el hecho, fuentes policiales señalaron que el móvil que cobra fuerza en las pesquisas es el de la venganza.
Al parecer, la adolescente conocía a los sujetos que la ultimaron.
Se comentó que los asesinos presuntamente tienen problemas con el hombre que la jovencita visitó en el Internado Judicial José Antonio Anzoátegui. Trascendió que la malograda muchacha acostumbraba a ir a este sitio de reclusión durante los correspondientes días de visita.
Los organismos policiales tratan de ubicar a la muchacha que logró escapar a fin de interrogarla.
13 muertes violentas han ocurrido en Barcelona en lo que va de año. Estas cifras incluyen a un chofer y un colector, desaparecidos durante 26 día, y cuyos cadáveres fueron hallados el 4 de agosto en el río Neverí, sin cabeza ni manos. Además un hombre fue abatido por funcionarios del Cicpc cuando supuestamente robaba en un autobús.
FUENTE: http://eltiempo.com.ve/sucesos/homicidio/ultimaron-de-nueve-balazos-a-una-adolescente-de-17-anos/29109
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