La donación de órganos ha sido tema de primer orden en todos los noticieros desde este lunes, luego de que fuera activado el Sistema Nacional de Información sobre Donación y Trasplante (Sinidot), una aplicación web en la que todo venezolano o residente puede ratificar la decisión de dar sus órganos y tejidos al morir, o negarse expresamente a ello, para dejar sin efecto la figura de donante presunto.
La iniciativa es aplaudida por los ciudadanos que poseen conciencia acerca de las implicaciones en torno al tema, pero principalmente por aquellos que están anotados en las listas de espera de trasplante, unas cinco mil personas; también la aplauden los familiares de esos 5.000 seres humanos; y quienes ya fueron trasplantados, más los seres queridos de éstos últimos.
"Dios quiera, y la virgen, que eso (el Sinidot) mejore la vida de tanta gente que padece, que vive a medias, por falta de un riñón. Mi esposo entró en lista de espera hace cuatro años, pero ahora tiene 71 y los médicos dicen que es poco probable que resista un trasplante. Además, hay más de mil personas en la lista, y los niños son prioridad. Seguimos dializándolo en el hospital Vargas lunes, miércoles y viernes, sin falta, pero esto es muy fuerte, para él y para nosotros (familia), hay que tener mucha paciencia".
El relato corresponde a Hilda Lairet, la esposa del afectado en el testimonio, quien padece insuficiencia renal como consecuencia de una silenciosa tensión alta que le dañó ambos riñones.
Las cifras más actualizadas del Programa Nacional de Donación y Trasplante de Órganos indican que hay más de 5.000 personas esperando por un órgano o algún tejido. De éstas, 1.300 necesitan un riñón para continuar viviendo. Alrededor de 1.500 están en espera de córneas; más de 345 necesitan médula osea y al menos 20 requieren un trasplante de hígado.
La historia que ahora puede contar Yoger Orellana, de 14 años, es distinta a la de Hilda. Es receptor de las córneas que otra persona decidió donar al fallecer.
"A Yoger le diagnosticaron queratocono cuando tenía siete años. Un día, le cayó arena en el ojo izquierdo y, cuando se frotó, se dañó la retina. Le hicieron un trasplante, pero lo rechazó. En el segundo intento todo salió bien. Un año después, le trasplantaron la cornea derecha. Tiene cuatro años de trasplantado, estuvo en lista de espera un año. Las tres operaciones fueron en el (hospital) Militar, y el control post-operatorio también", reseña el papá del joven, Francisco Orellana.
El problema de Yoger le generó un retraso en las actividades escolares. Hoy día estudia sexto grado, pero ya asiste a clases normalmente y hace deportes. "Lleva la vida que merece un niño de su edad", completa el padre, antes de opinar sobre el Sinidot: "Es bueno que la gente sepa que puede salvar a un niño como mi hijo, y sin perder nada, porque si la persona que donó sus ojos hubiera pensado distinto, igual se habrían podrido en una tumba".
La coordinadora hospitalaria de trasplantes en el Distrito Capital, Jazmín Pérez, precisa que todas las razones posibles para motivar la donación de órganos y tejidos se limitan a una fundamental: "Todos deberíamos donar órganos porque nadie está exento de requerir un trasplante. Cualquier persona, cualquier familiar nuestro, podría ser el próximo en las listas de espera".
Las cifras de donación se miden por cada millón de habitantes. Venezuela cerró 2011 con 3,83 donantes por millón, muy por debajo del promedio en Latinoamérica, que está en 7,4. España lidera la lista de países con mayor número de donantes voluntarios, con 38,8 por millón.
Sobre los miedos y mitos, otra joven trasplantada, Rosiel Ugas, de 18 años, sugiere lo lógico, que "el tema debería hablarse más en los liceos y las escuelas (...). Hay mucha ignorancia, la gente cree que pueden buscarla para matarla y cosas así".
El pasado 22 de noviembre, Rosiel cumplió dos años de haber recibido el riñón de otro ser humano, y de vivir libre del cateter que le impedía llevar sus días con normalidad.
En Venezuela no se ha comprobado, hasta la fecha, ningún caso real de tráfico de órganos, ni existen denuncias al respecto registradas en los cuerpos de seguridad. Por otra parte, la mayoría de las religiones están de acuerdo con la donación de órganos, incluida la católica.
Para informarse sobre el Sinidot es necesario ingresar a la página web del Ministerio para la Salud (www.mpps.gob.ve).
FUENTE: AVN