miércoles, 8 de agosto de 2012

Abuela de Limardo: "Más hace el que quiere que el que puede"

Carmen Carreño Gascón, abuela del esgrimista y medallista de oro, Rubén Limardo Gascón, recuerda conmovida las vicisitudes que pasó su nieto desde los seis años junto a la fallecida Noris Gascón, madre del atleta, para hacer historia en el deporte nacional. La señora Carmen ve reflejado en la hazaña de Rubén aquel dicho popular que reza: "Más hace el que quiere que el que puede".
"Ella (Noris) pasó mucho trabajo con él. En Polonia luchó mucho por entrenar. Entrenaban en la calle, en cualquier lado. Yo estaba allá con ellos y veía que no tenían recursos. Gracias al gobierno del presidente (Hugo) Chávez, le agradezco mucho que le metió la mano y lo ayudó mucho", expresó la abuela de 82 años, durante el acto de reconocimiento a Limardo en el Teatro Teresa Carreño de Caracas.

Nunca había pasado por la cabeza de Carmen que en una familia de escasos recursos pudiera alcanzarse semejante logro como el de Rubén en Londres 2012, pero cuando se preparaba para acompañar a su nieto a las olimpiadas de este año se decía a sí misma: "Voy a ver a mi nieto siendo campeón". Era el sueño de su hija Noris, quien murió en 2010 y fue un ejemplo para los tres hijos que tuvo.

"Me quedaron mis tres nietos de recuerdo, los quiero muchísimo, los adoro como si fuera la mamá. Yo soy la abuela maternal y los quiero mucho, los adoro. La vida continúa. Aquí estoy, luchando", manifestó la señora Carmen.

Los estudios y el deporte

El entrenamiento que requiere un atleta puede dificultar su permanencia en los estudios. Sin embargo, es posible seguir adelante con ambas facetas. Fue el caso del judoca Ricardo Valderrama, uno de los 69 atletas venezolanos que conformaron la delegación a Londres.

"Lo más difícil ha sido combinar sus estudios con el deporte. Pero siempre ha existido el equilibrio, gracias a Dios", comentó la madre de Ricardo, Jenny Pérez.

El joven de 25 años de edad entrena desde los siete. Sus padres lo acompañaron en todo momento y hoy los llena de satisfacción: "Me siento orgullosa, estamos muy felices, no solamente yo, toda la familia. Me siento grandota ¡Feliz, feliz, feliz!", dijo Jenny.

El equilibrio entre estudios y deporte también fue logrado por Elías Malavé Burgos, quien representó a Venezuela en Londres 2012 en la disciplina de tiro al arco.

"(Elías) estaba en el liceo y agarraba tiempo para eso (el deporte). Muy buen estudiante, gracias a Dios, y se organizaba él mismo", relató Cruz María Burgos, la madre de Elías.

La separación de la familia es otro reto que enfrentan los atletas, señaló Cruz María: "Él es muy pegado conmigo, con sus hermanos. Él siempre me dice: 'Mami, quiero estar en la casa, quiero estar allá', pero tiene que cumplir sus compromisos".

FUENTE: AVN

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