Un mes ha transcurrido desde que el dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López quedara bajo arresto domiciliario tras pasar más de tres años en prisión.Su carrera la forjó como adversario del presidente fallecido Hugo Chávez. Pero, fue en el 2015 cuando fue sentenciado a 13 años, nueve meses y siete días de cárcel, acusado de incitación a la violencia en protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro que dejaron 43 muertos entre febrero y mayo de 2014.
Desde entonces, su vida cambió, haciendo crecer la admiración hacia su persona desde el exterior. Una prueba de ello es la campaña de Ola Elvestuen, un político de Noruega, quien intenta nominar al líder de la tolda naranja para el Premio Nobel de la Paz 2018.
“Él y la oposición en Venezuela es nuestra mejor esperanza de que el país evite el colapso completo, y merecen todo el apoyo de la comunidad internacional (…) López luchó por una nueva y democrática Venezuela, donde los derechos humanos de sus ciudadanos son pisoteados por el gobierno”, dijo Elvestuen, según reseña Venstre.
Ante ello, Elvestuen asegura que tiene hasta febrero del 2018 para nominarlo, sin embargo, destaca que necesita el apoyo internacional para concretar la candidatura. “Voy a movilizar el apoyo de los funcionarios electos de nuestros partidos hermanos liberales de Europa. Todos debemos estar en las barricadas de la democracia en Venezuela”, concluyó.
FUENTE: Con información de http://elcooperante.com
