En ese diminuto recinto educativo, construido hace nueve años por Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (Pdvsa) estudian un aproximado de 20 niños.
William Colón es el único profesor con que cuenta el plantel levantado en madera, y que está adscrito al Gobierno nacional.
Cuenta que por falta de más educadores y de espacios imparte sus materias a todos los alumnos en un solo turno, de 7:00 a 11:30 am.
De un lado divide a los cursantes de primer a tercer grado, mientras que a los de cuarto, quinto y sexto los coloca del otro extremo del aula.
Por minutos atiende en una pizarra a uno de los grupos, mientras que luego se dedica a los restants, en el otro pizarrón.
“Es el método que empleo, porque aquí no hay más profesores y no tenemos otra alternativa”, dijo el educador, quien reside en La Borracha. El docente contó que la estatal petrolera se comprometió a construir la segunda etapa de la institución, pero no ha cumplido.
En el lugar donde está prevista la ampliación del plantel sólo se dejan ver algunas bases oxidadas. La estructura es la única en el territorio insular que cuenta con pocetas y baños sépticos, por disposición del Instituto Nacional de Parques (Inparques).
Así lo dijo la residente Carmen Rojas, quien aseguró que el resto de la isla tiene prohibido construir baños.
Sin comida
Habitantes indicaron que el pequeño comedor del colegio no funciona a veces por falta de comida.
Los alimentos para el almuerzo de los jóvenes aprendices los otorga la sede principal de Mercal, en la avenida Intercomunal.
“Queremos una escuela más bonita y más ventiladores”, dijo uno de los estudiantes.
| FUENTE: Pablo Mundaraín (El Mío) - http://eltiempo.com.ve |
