Con esta finalidad, Josefina Salazar, presidenta de PDVSA Intevep, se reunió este miércoles, en Moscú, Rusia, con la empresa Castillo Max Oil and Gas, una firma venezolana, miembro del Conglomerado Nacional Industrial Petrolero (CNIP), que está proponiendo a la estatal unificar las especificaciones técnicas para monoboyas y brazos de carga en todos los terminales de la industria, de acuerdo a un esquema diseñado para la modernización de estas instalaciones
El sistema propuesto promete ahorrar recursos y hacer más eficiente el proceso de carga que se realiza desde los terminales de Petróleos de Venezuela.
“Esta propuesta permite mejorar la cantidad de barriles por hora que despachamos, y eso se traduce en tiempo y dinero”, señaló Salazar.
Adelantó que de ser aprobado el proyecto, por el gran volumen de inversiones que requiere, se haría por fases, comenzando por aquellos terminales cuya mejora tenga mayor impacto económico.
La empresa Castillo Max tiene actualmente a su cargo la modernización del Terminal de Almacenamiento y Embarque de Crudo José Antonio Anzoátegui (TAECJAA), desde donde se atienden un promedio de 62 buques por mes.
Este proyecto incluye el reemplazo de once brazos de carga, de los cuales ya se han colocado ocho; la instalación de dos monoboyas, que tomará 42 días, y que probablemente se inicie en julio; y el control de ácido sulfídrico, a través de un sistema pionero en el mundo, diseñado por la empresa Castillo Max especialmente para instalaciones costa afuera.
“Trabajar con una empresa venezolana nos permite tener más confianza y al mismo tiempo contribuir a desarrollar capacidad de producción de equipos en el país”, destacó Josefina Salazar, quien puntualizó que en el marco de la evaluación de la propuesta se realizará una reunión con los negocios involucrados en las próximas semanas.
Su presidente, Miguel Castillo, destacó que la empresa logró –con la instalación de los nuevos brazos de carga en el TAECJAA- elevar la capacidad de 36 mil barriles hora a 72 mil barriles hora en cada muelle; “prácticamente lo duplicó”.
El tiempo operacional sobre el cual se basó la optimización se calculó en 36 horas,lo que corresponde al estándar internacional. “Por cada hora extra en el proceso de carga, PDVSA tiene que pagar por la demora”.
El terminal del Complejo José Antonio Anzoátegui, destacó Castillo, es la plataforma más importante de Latinoamérica, desde donde se exportan un millón y medio de barriles de crudo diariamente, “que es la mitad del petróleo venezolano”.
Software venezolano
La empresa Castillo Max lanzó durante el XXI Congreso Mundial de Petróleo un software para optimización y diseño de terminales. Optimize integra una serie de cálculos de ingeniería con una interfaz gráfica, en base a las normativas internacionales, que permiten diseñar en pocos segundos todos los elementos que integran un terminal, cálculos que normalmente toman un año, incluyendo el diámetro, presión y material de las tuberías, tamaño de las bridas, tamaño y tipo de tanques, ganchos de amarre, entre otros.
Castillo considera que esta empresa –que actualmente trabaja en producción de innovaciones no petroleras- de alguna manera responde a la expectativa de la economía venezolana de ir más allá de la explotación de los hidrocarburos.
FUENTE: SIbci - http://www.finanzasdigital.com |