martes, 9 de abril de 2013

Sucrenses ratificaron lealtad a Maduro para lograr victoria de la Revolución

La ansiedad de los sucrenses por la llegada del candidato de la Revolución, Nicolás Maduro, se podía sentir por toda la avenida Nueva Toledo de Cumaná, donde se concentraron este lunes para recibir al aspirante revolucionario.
Unidos en una gran marea roja, no paraban de gritar consignas que se unían en una sola voz, agitaban al ritmo del viento banderas y afiches con el rostro de Maduro o del comandante Hugo Chávez y alzaban sus puños en señal de apoyo al candidato de la Revolución Bolivariana.

Para amenizar el momento, la agrupación musical Cuerdas y Capachos, conformada por "una cuerda de viejos", tal como la definió el cantante del grupo, ofreció su repertorio de música folclórica. Le siguió un dúo de calipso, cuyas canciones rindieron homenaje al líder socialista, Hugo Chávez.

"Nicolás Maduro es la continuidad de la Revolución Bolivariana, porque es el único que mantendrá las misiones sociales creadas por el comandante supremo, Hugo Chávez", dijo Silvia Valentina Lárez, quien en ningún momento dejó de expresar en la concentración su admiración por el proceso revolucionario y por el legado del comandante Chávez.

Virgilio Granado también estuvo en Cumaná, luego de un viaje de cinco horas por carretera, para acompañar a Nicolás Maduro. Este sucrense salió temprano de San Juan de las Galdonas, en el municipio Arismendi, para ver de cerca al candidato socialista.

"Lo apoyo porque es la continuidad del proceso revolucionario, es cumplir con el legado que nos dejó nuestro comandante Chávez de que votemos por Nicolás, y eso lo vamos a cumplir", señaló mientras le caían gotas de agua de las botellas plásticas que agitaban muchos para aliviar el calor.

Maduro se abre paso entre la multitud

Un dirigente político regional que se encontraba en la tarima anunciaba con voz ronca que Nicolás Maduro estaba cerca. Pasaban los minutos, y el dirigente volvía a repetir la frase. La gente volteaba y sólo se divisaba el rojo intenso de la pasión revolucionaria. La ansiedad crecía como una ola.

De repente, gritos de emoción comenzaron a agitar a la multitud. Personas montadas sobre los techos de las casas brincaban de la alegría al ver a Nicolás Maduro, quien se abría paso entre la marea roja. El sol aún estaba fuerte, a pesar de que eran las 3:30 de la tarde.

Junto a su compañera, Cilia Flores, saludaba a los presentes, levantaba su puño y tomó una bandera gigante con el rostro grabado de Alí Primera que sostenía un militante, mientras el aspirante llegaba a la tarima desde la que ofreció un discurso frente a miles se seguidores.

Proyectos para Sucre

A medida que Maduro anunciaba la asignación de recursos para la ejecución de proyectos en la entidad, los sucrenses celebraban con aplausos.

Mencionó la aprobación de 40 millones de bolívares para la rehabilitación completa de la troncal 10, carretera entre los estados Sucre y Monagas; así como 50 millones de bolívares para la constitución de una corporación de desarrollo para fortalecer la producción agrícola y pesquera.

También se refirió al proyecto de saneamiento para el litoral en Carúpano, municipio Bermúdez, donde se construirá una planta de tratamiento; además, informó el proyecto de recuperación del casco histórico de Cumaná y una plan de asfaltado a Sucre.

En la concentración se informó que bautizarán con el nombre Hugo Chávez la Circunvalación Sur, proyecto de ampliación de la avenida Cancamure.

Además, resaltó que la Gran Misión Vivienda Venezuela en la entidad se mantendrá y mejorará. "En Sucre se han construido y entregado 8.987 viviendas (en dos años). Vamos a entregar este año 11.260 más. Al 2019 habremos entregado casi 80.000 viviendas que necesita el estado", enfatizó.

La cercanía entre el candidato y los asistentes siempre fue notable. El aspirante invitó a la tarima Francisco Galindo, un hombre que le aseguró ser un buen narrador de carreras de caballo. Así, relató una carrera, imitando a Alí Khan, donde los competidores eran los candidatos presidenciales. La carrera, de acuerdo con su relato, la ganó Maduro.

También subió a la tarima Leonardo Carpintero, de 12 años de edad, acompañado por su cuatro. El joven procedente de un pueblito rural cerca de Cumanacoa, en el municipio Montes, convirtió el amor a Chávez en música.

"Sentado en el frente de mi casa con un nudo en la garganta y con ganas de llorar, pensando en mi presidente Chávez que más nunca lo volveré a mirar, hoy le pregunto a todos los militantes y nadie me quiere contestar ¿En dónde está mi comandante? En la tarima no lo escucho hablar o cantándole al pueblo de Venezuela el Himno Nacional", dice parte de la letra de la melodía que le dedicó al líder revolucionario.

Al culminar el acto, una mujer exclamó: "Mi hermana, como si hubiese venido Chávez".

FUENTE: AVN

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