En la entrada de la calle cuatro estaba Luisa Díaz con una de sus cinco hijas, a la espera del camión repartidor de gas para comprar una bombona pequeña. Allí, bajo la sombra de una mata, habló de lo difícil que es caminar por Los Chaguaramos cuando llueve y de las plagas que deben combatir todos los días del año. “Sin asfalto y sin aceras, así vamos a pasar otra vez las navidades. Hoy no llovió, porque si no, estuviéramos rodeados de charco. Ahora estamos tragando polvo con este tierrero en las calles. Me gustaría que el alcalde de Puerto La Cruz y el gobernador de Anzoátegui vinieran a visitarnos para que conozcan de cerca nuestras necesidades”, manifestó Díaz.
En la misma cuadra, la señora Jenny Zorrilla estaba en su rancho con sus cuatro hijos. Hace cinco años vivía en Machurucuto (estado Miranda), pero se mudó a Los Chaguaramos cuando quedó damnifi cada. “Mi mayor preocupación es que mi casa está rodeada de agua estancada. No hay drenajes y cuando cae un aguacero se inunda el cuarto de mis hijos. Tampoco hay cloacas y hacemos las necesidades en bolsas de plástico que luego tiramos a la basura. Mi esposo trató de construir un pozo séptico, pero no se pudo porque a los pocos metros de profundidad emanó agua”, dijo el ama de casa, quien hace tres meses se cansó de gastar dinero en pasaje hacia la alcaldía de Sotillo para conseguir los recursos que le prometieron y mejorar su vivienda.
El plaguero
La señora Yuraima Aguilera tiene su casa en la calle 2 y se quejó de las plagas que azotan a los residentes. “Necesitamos que vengan a fumigar por lo menos dos veces al mes porque hay un plaguero que se alborota desde las 6 de la tarde. Los niños son los que más sufren”, indicó la vecina.
Los residentes que viven al fi nal de las cuatro vías dijeron que la maleza que hay en Los Chaguaramos se convirtió en un criadero de ratas y de zancudos, por lo que urgen de una cuadrilla para que despeje el monte de la zona. Aminta Fariña, vocera del consejo comunal, explicó que hay varios proyectos por desarrollar en Los Chaguaramos para benefi ciar a más de 200 familias, entre ellos la construcción de viviendas, servicio de electricidad, agua y vialidad. “Gracias al aporte de Corpoelec se logró la instalación de seis transformadores además de los postes en cada calle para mejorar el servicio eléctrico este mismo año”, dijo la mujer, quien agregó que se están adelantando las mesas de trabajo con Hidrocaribe para suministrar agua a la comunidad, donde la mayoría de los residentes recurren a las tomas ilegales que afectan a otros sector instalados a lo largo y ancho de la zona rural.
Llegaron los postes
Residentes de Los Chaguaramos ven con optimismo la instalación de postes para mejorar el servicio eléctrico en la comunidad, donde los cables a baja altura generan apagones por largas horas
FUENTE: Omar E. Pérez / El Mío - http://eltiempo.com.ve
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