Según denunció Elpidio Rojas, el pasado 6 de marzo los dueños de la Wrangler interpusieron una solicitud ante la inspectoria del trabajo de la ciudad de Caracas solicitando la suspensión de salario de más de 160 trabajadores, suspensión que ejecutaron de inmediato pese a que la dependencia del Ministerio del Trabajo no se ha pronunciado al respecto hasta la fecha. “Los trabajadores están sin cobrar salario y el Ministerio del Trabajo no se pronuncia al respecto”.
Rojas también habló sobre la situación general del sector al afirmar que en la actualidad la actividad textil (telas y confesión) se encuentra diezmada. “En la década de los 80s había cerca de 50 mil trabajadores en el sector textil en Venezuela, ahora hay poco mas de 3 mil (…) nuestro sindicato llego a afiliar cerca de 12 mil personas”.
Explicó que Venezuela importa en la actualidad el 98% de las telas que se usan en la nación, y más de 80% de lo que se necesita para vestir a la población (Camisas, franelas, pantalones, vestido, medias); asegura que esta actividad ha sido diezmada en el país por la política de importación de los últimos 30 años.
“Importamos de china y Suramérica la mayoría de lo que necesitamos para vestir (…), en cuanto a las telas casi todas proviene de Suramérica”.
El líder sindical advirtió que las reciente medidas y funcionamiento de las instituciones no hacen bien a los intereses de la clase trabajadora al referirse a la reciente interpretación del TSJ, el deterioro del Ministerio del Trabajo y la ausencia de participación de las organizaciones obreras en los espacios convocados por el Gobierno revolucionario.
“El Ministerio del Trabajo en un órgano ineficiente y corrupto, necesita de la participación popular para entrar en revolución (…), por otro lado, herramientas de lucha ante el desastre de es este ministerio, como es la movilización ahora se obstaculiza, y por ultimo no se nos deja participar en la grandes decisiones del país como la economía”.
Piensa que clase trabajadora tendrá que movilizarse unida para que no solo la alta burocracia y los empresarios decidan la economía de Venezuela y su futuro próximo. “No nos están dejando mucha opciones, pero hay mucho que decir y proponer; tenemos que hacer que no escuchen”
| FUENTE: Prensa Unete - http://www.aporrea.org |
