Buscan solución para evitar violencia en planteles educativos

Hace algunos años la violencia en los planteles educativos se reducía a una simple pelea a puños entre los jóvenes. En la actualidad ese simple forcejeo desapareció y ahora los estudiantes hasta portan armas para agredirse entre ellos.
Tales son los casos del Liceo Bolivariano Nueva Esparta, en Porlamar y la Unidad Educativa José Ramón Luna en El Salado, de los cuales, según se conoció, presentan un alto índice de inseguridad.

Los alumnos en reiteradas oportunidades sacan armas de fuego de cualquier calibre para amedrentarse entre ellos y hasta amenazan de muerte a los directores y educadores de su plantel, con tal de que hagan lo que ellos quieren, según relataron algunos profesores que omiten sus nombres por razones obvias.
Las bandas delictivas los esperan a la salida de los liceos con el propósito de atracar a quienes salgan y de “agarrarse” con aquellos con los que tengan problemas.

La Solución

Para evitar que estos conflictos continúen o se incrementen en los colegios, la Zona Educativa conjuntamente con el profesorado y la Organización Nacional Antidrogas (ONA), ofrecen diversos talleres y charlas a los alumnos para ayudarlos a mejorar las relaciones con sus compañeros y a crear un ambiente agradable para todos.

Con este propósito se creó el programa “El Dibise va a la Escuela”, que entró en vigencia hace menos de un año. Mediante el dispositivo de seguridad se dictan charlas de prevención en las cuales indican a los estudiantes las sanciones que tendrán que pagar al cometer una falta o delito.

Se les orienta a una comunicación efectiva con sus padres y profesores, donde expongan sus inquietudes y problemas para poder ayudarlos y brindarles orientación.
Asimismo, la Brigada Estudiantil por la Paz, creada en el año 2007, es una organización a la cual los alumnos pueden manifestar sus vicisitudes, de manera que los educadores puedan buscarles una ayuda viable.

La jefa de la Zona Educativa, Rosa Cedeño, indicó que ellos brindan orientación en las aulas, pero gran parte de los problemas conductuales y delictuales de los estudiantes obedecen a la disociación familiar. Agregó que cuando los profesores ahondan en ese plano, se percatan que el joven actúa de esa manera porque no hay límites en casa o simplemente estás rodeados de violencia.

FUENTE: http://www.elsoldemargarita.com.ve