Hace dos días la Corte Marcial celebró una audiencia para escuchar la apelación a la sentencia condenatoria de los nueve militares.
Los planes para derrocar a Maduro se plantearon en tres reuniones, dos de las cuales fueron en la urbanización San Jacinto de Maracay (Ara), residencia del general Oswaldo Hernández, alias “El Oso”. Hernández era la persona que leería un pronunciamiento “el cual sería televisado y transmitido por las redes sociales”. El personal involucrado en dicha rebelión se identificaría con unos brazaletes blancos.
El papel del Cicpc. El movimiento tendría el apoyo de unidades del Cicpc “que serían los encargados de capturar a altas personalidades del Gobierno”. Mientras que al personal de la Fuerza Aérea le correspondería la toma de las bases Mariscal Sucre (Maracay), Vicente Landaeta Gil (Barquisimeto), Aeroespacional Manuel Ríos (El Sombrero) y Rafael Urdaneta (Maracaibo). “La base aérea La Carlota sería el epicentro de todo”, refieren las investigaciones.
Otra de las reuniones preparatorias del movimiento se realizó en la urbanización El Castaño de Maracay (Ara). Allí se precisó que los objetivos militares a bombardear serían Miraflores, los ministerios de Defensa, Interiores, la Dirección General de Contrainteligencia Militar y Telesur. “Estos dos últimos objetivos serían bombardeados presuntamente por el capitán Andrés Thomson con un avión tipo Tucano artillado de la Aviación Militar”, refiere la sentencia.
Thomson es uno de los nueve militares condenados en mayo pasado. Ahora la Corte Marcial tiene 10 días de despacho para decidir si confirma, modifica o anula la condena contra esos 9 militares acusados.
La sentencia refiere que además de ese grupo de funcionarios castrenses ya condenados “faltan otros militares y civiles por identificar”.
El ministro de la Defensa, Vladimir Padrino, recomendó hace dos días leer el último artículo del director de Últimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel, titulado Peligros de Golpe.
FUENTE: Eligio Rojas - http://www.ultimasnoticias.com.ve |