Carl Herrera, entrenador de Gigantes de Guayana, se comunicó con la redacción de Líder porque según él “personas vinculadas con la LPB y que me conocen, quieren dañar mi imagen”, luego del altercado que tuvo el ex NBA en el Fórum de Valencia, donde el padre del jugador de Trotamundos de Carabobo, Héctor “Pepito” Romero, salió con una lesión en el rostro.
“No puedo permitir que creen una imagen de mí que no es la correcta”, señaló Herrera. “Dicen que yo tengo problemas de ira, pero creo que algunas personas que van a los juegos son peores que yo, porque lo que van es a insultar a las personas que estamos trabajando: entrenadores, jugadores, gerentes y árbitros”, agregó.
“Yo soy una persona tranquila, me dirijo a la gente con respeto. En el video de ese juego en Valencia se puede ver que yo hablé de la mejor manera con el papá de ‘Pepito’ y después hablé con el mismo Héctor en los mejores términos. “¿Una persona con problemas de ira hubiese manejado la situación en ese momento así y más cuando lo llaman cobarde?”, se preguntó el estratega.
“Si yo tuviese problemas de ira hubiese reaccionado de otra manera”, agregó.
Herrera insistió en que agredió al señor Romero rato después de terminado el duelo porque éste siguió hostigándolo y que pensó que el agredido iba a ser él. “Claro que traté de evitar mi reacción. Después del partido, cuando el señor me fue a buscar, hablamos como seis minutos, luego le dije que no quería seguir hablando del tema. Traté de irme, pero me puso los brazos encima, lo aparté y volvió a venir hacia delante y reaccioné”.
-¿Cree usted que debe ofrecer una disculpa por lo sucedido?
-No, porque traté de evitar. No puedo tolerar que se me falte el respeto ni a mí ni a mis familiares, eso no lo permitiré.
Además, en ese momento no estaban dadas las condiciones de seguridad y eso es algo que quiero denunciar ante la liga. Las organizaciones deben garantizar seguridad al equipo contrario hasta que abandone las instalaciones deportivas.
Si allí hubiese habido un cordón de seguridad, ni el señor ni ningún fanático podría acercarse a las personas que estamos trabajando. Así sucede en la NBA y en los torneos internacionales”.
El ex miembro de los Rockets dijo que “no puede ser que a cada cancha que uno va, los técnicos, jugadores, árbitros y directivos, tengamos que lidiar con insultos y faltas de respeto. Es necesario reforzar la seguridad. Lo que ocurrió puede servir para que no se vuelva a repetir”.
FUENTE: Reiner Izturriaga - http://www.liderendeportes.com
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