El hijo legítimo de Carlos Baute, José Daniel Arellán, ha puesto a su padre entre la espada y la pared. Después del contencioso que han mantenido en los último años, a pesar del que el cantante reconociera ante el juez en 2012 su paternidad, el joven ha publicado ahora una carta en la revista ¡Qué me dices! en la que, lejos de firmar la paz, arremete duramente contra su progenitor, con sentencias como esta: “Es de muy hipócritas cantarle al amor y defender a la mujer en tus canciones”.José Daniel, que ahora tiene 26, está cansado y ha querido plantarle cara a Baute en una batalla que parece que va para largo, ya que el hijo del cantante ha decidido recurrir la resolución judicial y además pedir una pensión mensual para los próximos cinco meses: “Por si no te has enterado, he recurrido. Esta batalla no termina aquí. Seguiré luchando”, le ha advertido en la carta.
Arellán escribe para la publicación: “Has preferido gastarte miles de euros en contratar a un detective privado para investigarme. Siento decirte que malgastaste tu dinero, ese informe estaba repleto de mentiras”, ha escrito Arellán. Además, añade que no quiere una manutención económica de por vida sino una reclamación para que le ayude a crecer como persona y profesionalmente”.
Y en la parte final de la misiva es donde el joven se muestra más duro con Baute: “A día de hoy siento vergüenza de que seas mi padre. Jamás me he sentido más humillado y despreciado por nadie como por ti el día del juicio cuando me enteré de que acudiste a la Policía para informarte de mi estado migratorio. Tú sabes bien que mis papeles aún están en trámite, y yo te pregunto: ¿Tú intención era que me deportasen para Venezuela, verdad? Así tenías un problema menos”. Así de directo y con estas duras palabras ha hecho pública su versión.
Carlos Baute no se ha pronunciado por el momento sobre las duras palabras de su hijo, y disfruta ajeno a la polémica, de su nuevo éxito musical, Amor y dolor , y de su cercana paternidad con Astrid Klisans, con quien tendrán su primer hijo en común.
FUENTE: http://www.lavanguardia.com
