El Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex) mantiene suspendidas las solicitudes de divisas para jubilados y pensionados en el exterior, desde el 5 de enero de 2016. Hasta la fecha, el organismo no ha dado un parte oficial para ofrecer una respuesta a la comunidad de venezolanos que viven fuera del país y que se han visto afectados por la decisión.Miguel Mejías, profesor jubilado de la Universidad de Carabobo y quien reside actualmente en España, señala que además de la suspensión de divisas también permanecen los retrasos en los pagos de quienes el año pasado solicitaron dólares para el segundo semestre de 2015.
“En abril unos cuantos jubilados sí cobraron, pero muy pocos, 10% según mis cálculos. En cuanto a los pensionados del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, en países con convenio (España, Italia, Portugal, Ecuador y Uruguay), tampoco se les ha pagado desde enero de 2016. O sea, van 7 meses de retraso”, asegura Mejías quien también administra el blog Jubilados en el Exterior, una plataforma digital para compartir información y conectar a más de seis mil venezolanos que se encuentran en la misma situación.
Mejías expresa su preocupación ante la falta de dinero para poder costear las necesidades y pagar los gastos: “Muchos de nosotros estamos viviendo de ahorros o de algunos trabajos eventuales. En mi caso hago traducciones y doy clases privadas de inglés. Muchos me reportan que viven gracias a la ayuda de parientes, hijos o amigos. Es muy duro estar mendigando a los 70 años para lo más elemental, no tener para el autobús, no poder pagar la luz o el agua”.
La situación de este profesor venezolano no dista mucho de la de otros connacionales que viven en Panamá o Estados Unidos. “En mi caso yo vendí mi casa para poder sobrevivir hasta el 2017 sin la pensión y con la esperanza de que se arregle nuestra situación. Si no tienes seguro, las medicinas en EEUU son incomprables y un seguro a nuestra edad cuesta no menos de 700 dólares mensuales”, manifiesta un empleado jubilado de la estatal petrolera PDVSA, quien prefiere mantener su nombre en anonimato por temor a represalias por parte de las autoridades del organismo que tutela su caso, Cencoex.
FUENTE: Arysbell Arismendi - http://www.elpitazo.com
