En la grabación se observa cuando el vehículo se detiene por unos segundos y se monta un hombre quien simula tener un brazo fracturado y cubierto con un cabestrillo, donde realmente esconde el arma.
En un santiamén, el homicida mira hacia el fondo del autobús, desenfunda el arma y dispara en la cabeza de la víctima, quien se encontraba en el asiento del copiloto.
De acuerdo con la reseña del diario El Tiempo, el crimen se registró el pasado 29 de junio, cerca de las 9.00 de la mañana, en la avenida Jorge Rodríguez, a la altura del distribuidor de Molorca.
En la parada del Bus de Transporte Rápido (BTR) de Molorca, la unidad, que cubría la ruta Barcelona-Puerto La Cruz por la avenida Intercomunal, se detuvo y recogió a un pasajero. Cuando el vehículo se desplazaba frente a la entrada del barrio, el hombre sacó un arma y le disparó por detrás a Julio César Freites Weky, de 34 años, quien recibió los balazos en la parte posterior de la cabeza y murió en el acto.
Tras el asesinato, el criminal se bajó del bus, se montó en una moto donde lo esperaba un compinche y huyó hacia el barrio Molorca. Al parecer, el motorizado seguía el bus, indicó el mencionado diario.
A la escena del suceso acudieron detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Barcelona, quienes llevaron el cadáver de Freites al recinto forense del hospital Razetti.
Se supo que los policías manejan el móvil de la venganza, aunque no descartan otras hipótesis.
La víctima recibió dos tiros en la región occipital, que le salieron por la boca y la nariz.
Militza Freites dijo que su sobrino Julio trabajaba en la refinería porteña desde hacía 10 años y vivía en una residencia en La Gulf, en Puerto La Cruz. Era soltero y sin hijos.
Comentó que Freites era un buen muchacho y que nunca le conocieron enemigos. Presume que lo confundieron con otra persona. Desconocía cómo habían pasado los hechos y quién es el homicida, concluyó la reseña. (PULSE AQUÍ PARA VER MÁS)
FUENTE: http://noticiaaldia.com
