lunes, 29 de junio de 2015

(Anzoátegui) De vuelta a la era del trueque

Leche por pañales y deter­gente por papel higiénico son los trueques más comu­nes entre los habitantes de la zona norte de Anzoátegui.
Lo que se practicaba hace aproximadamente 10 mil años, cuando apareció la sociedad agricultora-ganadera, regresó a la rutina de los venezolanos.

Los consumidores consulta­dos mencionaron que intercam­bian los productos regulados que no encuentran en el merca­do con sus conocidos, para no recurrir a los revendedores.

La ciudadana Rita Hernádez explicó que, por lo general, rea­lizan el cambio de un rubro por otro, sin tomar en cuenta el precio que marquen. Dijo que la familia siempre es la primera opción al momento de hacer el trueque.

Varias entrevistados coinci­dieron con Hernández.

El ama de casa Juliana Kauan comentó que mantiene comu­nicación con sus vecinos para saber qué artículos les hacen falta. Si el día que le correspon­de comprar encuentra algún producto que no requiere lo intercambia con ellos.

Trueques 2.0

El trueque 2.0, a través de las redes sociales, es el más practicado.

La necesidad de algunas personas por abastecerse en la región los llevó a crear grupos o direcciones digitales, en sitios como Instagram y Facebook, a fin de cambiar los productos escasos a precios justos.

En las cuentas on line, dedicadas exclusivamente al trueque, publican fotos con los artículos que solicitan o que disponen.

Jefferson Hernández, admi­nistrador de uno de los grupos, señaló que establecieron reglas en los sitios web para regir los intercambios porque han recibi­do amenazas.

“Como estamos en contra del bachaqueo y reportamos cuando los revendedores ofrecen artícu­los por precios exorbitantes, nos acosan a cada rato”.

Resaltó que también han sido víctimas de acciones delictivas porque los citan para intercam­biar un producto en un sitio y luego les roban la mercancía.

Lo que repitió tantas veces sobre el trueque el expresidente fallecido Hugo Chávez Frías, ahora lo viven a diario los vene­zolanos y en pleno siglo XXI.

“Un agricultor puede inter­cambiar plátanos por cachamas con un pescador, sin tener que utilizar el dinero para facilitar esa transacción”, planteó en una oportunidad Chávez, en una alocución.

Algunas de las medidas que aplican las cuentas en las redes sociales para trueques es: colocar los grupos en privado, aceptar sólo a referidos o conocidos y cambian medicinas y fórmulas lácteas por los mismos rubros.

FUENTE: Vestalia Muñoz / El Mío - http://eltiempo.com.ve

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