miércoles, 23 de abril de 2014

(Lara) Viajar por avión temprano es un completo viacrucis

Agarrar el avión madrugador es un suplicio en el Aeropuerto Internacional Jacinto Lara de Barquisimeto. Lo que podría pensar cualquier persona que es la mejor opción para estar temprano en Caracas, se le convierte una en pesadilla.

La coincidencia de los vuelos madrugadores de tres aerolíneas, (Aeropostal, Aserca e Insel) hace que el caos llueva sobre el aeropuerto, pues todos los servicios colapsan. La tortura comienza por la cantidad de usuarios; unos 140 pasajeros de Aeropostal, 80 de Aserca y 130 de Insel, lo que hace una multitud de 350 personas en un área de despacho limitada que se vuelve un despelote.

Llegar a las 4:00 de la madrugada, como Maira Martínez, cargando maletas y pegando carreras para chequearse lo hace también un centenar de viajeros. Maira quien es educadora jubilada, hizo un esfuerzo para llegar de madrugada un miércoles al aeropuerto para obtener su boarding pass (pase para abordar el avión).

Pero el chequeador de la línea Aeropostal llegó tarde y abrió el proceso a las 5:10 de la mañana, cuando debió iniciar a las 4:00 a.m. porque al pasajero se le exige que esté en el aeropuerto 2 horas antes para los vuelos nacionales y 3 horas para los internacionales. La línea Aeropostal solo tiene un chequeador para los 140 pasajeros. Es así como comienza la agonía para los usuarios de los vuelos madrugadores.

La angustia de Maira empezó cuando escuchó que el vuelo 761 de Aeropostal, que debía embarcar a las 5:50 de la mañana, se retrasaría porque el chequeo comenzó tarde.

La viajera tenía que estar en Caracas a las 8:00 de la mañana para una cita médica con un especialista que le vería la rodilla derecha, la cual tenía inflamada. “Yo creo que perdí mi cita”, decía la señora con cara de desesperación.

El sufrimiento mayor se vive en las colas adicionales que debe hacer el pasajero para: embalar las maletas, chequearse, pasar por Interpol, ir al baño, ir al cajero y hasta para tomarse un cafecito, porque la mayoría de las veces solo hay un local de comida abierto a esa hora. “Un día como hoy que salen 3 vuelos, es imposible pensar que un solo local de comida este abierto para 350 usuarios que llegamos de madrugada”, rezonga Maira.

La dolorosa procesión sigue en la sala de espera número 2, con un solo chequeador para los 140 pasajeros de Aeropostal y los 80 del vuelo de Aserca que sale a las 6:10am. “Esto no camina”, “a qué hora vamos a salir”, “deberíamos reclamar” es lo que protestan los pasajeros, en esta cola que casi no avanza. Al entrar a la sala de espera, para sentarse a descansar un ratico, los viajeros se encuentran con que solo hay 100 sillas para 210 pasajeros de las dos aerolíneas que salen en la mañanita. Según un trabajador del aeropuerto, que prefiere no revelar su nombre, hay 2 salas para los vuelos nacionales, pero para los madrugadores solo se abre una. La sala 3 está destinada para los vuelos internacionales a Curazao, donde otras 130 personas esperan en pleno pasillo para el chequeo.

Otra tortura para el viajero es sacar dinero.Solo hay 10 cajeros 2 en planta baja, que nunca tiene plata y 8 en el segundo piso (1 Bicentenario, 1 Venezuela, 4 del Provincial, 2 de Mercantil y 2 de Banesco) pero solo funcionan 4. “No pude sacar plata por las colas, podía perder el vuelo”, cuenta Maira.

Alexis Montilla, gerente general del aeropuerto, enfatiza que no hay espacio para ampliar el edificio. “Delante tenemos el estacionamiento, detrás la pista de aterrizaje y no podemos moverla, la única solución para atender este volumen de personas sería ampliar el edificio hacia arriba, pero eso llevaría planificación y presupuesto”, asegura.

FUENTE: Jennifer Orozco - http://www.laprensalara.com.ve

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